LA PEDAGOGIA CRÍTICA.
Caracterización y exponentes.
La pedagogía critica es el modelo educativo que impulsa una educación
que desarrolla el actuar praxista del estudiante y de todos los
actores escolares permitiéndoles alcanzar una conciencia crítica
transformativa y hasta revolucionaria de su ser social y
comunitario, librándolo de la dominación que se patentiza en
la ignorancia, creencias, mitos, dogmatismos y fanatismos que
han detenido el avance de la humanidad mediante el avasallante peso de las
instituciones educativas y el lastre escolar, propio de los sistemas
educativos capitalistas que en su curriculum oculto busca generar alumnos
dependientes y conservar el misticismo del objeto de conocimiento solo
reservados a los teóricos.
La pedagogía crítica emplea el circuito infinito de acción-reflexión
propio del actuar praxista transformador de la realidad
desarrollado por el discente (alumnos) y el docente como
partes indisolubles del proceso de aprendizaje. El educador tiene la obligación
moral de permanecer en constante revisión de su quehacer docente buscando
nuevas alternativas innovadoras para transformar su práctica profesional hacia
mejores escenarios educativos mediante el desarrollo de investigaciones
critica, que emplea métodos como la Investigación-acción, investigación
participante, sistematización de la practica entre otros. Por su parte el
estudiante (discente) tiene que transformarse en su trayecto formativo
escolar en un sujeto gnoseológico comprometido con su propio aprendizaje
mediante la puesta en marcha de técnicas, estrategias y métodos de
estudio colaborativos que el profesor sabiamente le proporcionara graduándolos a
su nivel de cognoscente.
La pedagogía critica es temida por el capitalismo, puesto
que cuando las masas estudiantiles y del proletariado se concientizan
desencadenas con sus marchas, plantones y manifestaciones transformar la
sociedad a partir de las acciones reformistas burguesas que busquen
calmar a las masas movilizada; prueba de esto fue la revolución educativa de
Paulo Freire en Brasil. En otras ocasiones cuando las circunstancias de
opresión social son exageradas y el nivel de concientización de las masas es
excelente provoca momentos de transición social de un modo de producción
a otro, ejemplo de lo anterior es el caso de Antonio Gramsci (1891-1937)
durante el apogeo del partido comunista italiano en el periodo de
transición del feudalismo al capitalismo, y del pedagogo Nicolás de
Condorcet (1743-1794) durante la Revolución francesa
A partir de la “teoría crítica” de la Escuela de Frankfurt
(neomarxistas culturales) una cantidad considerable de educadores del
mundo empezaron a forjar en el quehacer mismo de la práctica docente un
paradigma educativo, que paulatinamente fue configurando sus postulados
hasta constituirse en un verdadero modelo pedagógico.
En la actualidad los educadores más destacados que realizan una
labor de difusión incansable de la pedagogía crítica podemos mencionar al
catedrático canadiense Peter McLaren, el catedrático anglosajón
Henry Giroux y el catedrático australiano Stephen Kemmis.
Pero sin duda el máximo exponente de la pedagogía critica es el
educador brasileño Paulo Freire (1921-1997) revolucionador de la educación
brasileña a partir de sus metodologías: “la palabra generadora”, metodología
develadora de la realidad”, “la palabra liberadora” y de “la teoría
dialógica”.
POSTULADOS DE LA PEDAGOGIA CRÍTICA
En este esfuerzo enunciamos doce postulados de la pedagogía crítica,
que hemos considerado como los más importantes a saber:
*La pedagogía debe entenderse
como un proceso dialectico (en constante movimiento) en donde se negocian y se
producen significados de los conocimientos conceptuales, procedimentales
y actitudinales que permitan desarrollar el fortalecimiento personal, el
sentido de comunalidad y formas de vida comunitaria.
* La relación entre la
teoría-práctica. Debe entenderse como una dualidad
indisoluble que debe desarrollarse de manera fluida, a través de pesar y
repensar la práctica cotidiana sucintando la generación, acumulación y
negociación de conocimientos para enriquecer paulatinamente la
inacabable teoría; esto solo se logra a partir de una verdadera praxis
(acción-reflexión) de los sujetos cognoscentes de la escuela, para lo cual es
necesario que el alumno adquiera el conjunto de valores inherentes al
aprecio por el acto cognoscente constituyéndose en un sujeto que
“aprenda a aprender” y en el profesor en un educador.
* El proceso de
enseñanza-aprendizaje debe ser dialectico, es decir, que tenga una
coherencia entre las actividades de enseñanzas contextualizadas, las metas y la
evaluación permanente de carácter formativo. Además debe fomentarse un ambiente
cooperativo en donde se haga presente la reflexión crítica necesaria para
negociación, creación y recreación de significados de los conocimientos
científicos y comunitarios, mediante procesos democráticos y justos
en donde el estudiante exprese libremente sus conocimientos adquiridos.
* El proceso de apropiación del
conocimiento debe proporcionar instrumentos para la reflexión crítica que
permitan transformar la realidad y transformarse a sí mismo. Este
se genera cuando el estudiante tiene un fin consciente y
asume su papel de sujeto cognoscente en el contrato didáctico en donde se
debe definir las metas, propósitos, interacciones, etc. Que se establecen
en la comunidad de aprendizaje para adquirir y negociar los conocimientos
científicos con los comunitarios y contextualizados
* La clase dialéctica-critica
debe partir de la realidad concreta en que se desenvuelve el escolar,
promoverse procesos de observación, análisis y reflexión crítica para
enriquecer el conocimiento previo del estudiante quien deberá aportar
soluciones a las problemáticas de la realidad de estudio. El proceso de
aprendizaje tendrá su verdadera función formativa cuando el docente
construye un proceso a-didáctico obligando al estudiante a
responsabilizarse de su acción cognoscente y convertirse en el productor de
soluciones a los problemas de su entorno.
* El grupo escolar debe constituirse en
una comunidad de auto y coeaprendizaje producto de la sociodiversidad
(interculturalidad y multiculturalidad) y del sentido de comunalidad.
*Los aprendizajes teóricos escolares
deben tener un abordaje critico de las distintas fuentes de información (libro
de texto, bibliografía diversa, videos, etc.) para percatarse de la
conciencia de clase del autor así como el manejo de ciertos aspectos de la
realidad privilegiando algunos en detrimentos de otros
* Generar en el estudiante la concepción
del conocimiento, como inacabado y en constante proceso de evolución
producto de un proceso de ajuste dialectico entre la teoría actual
y la práctica cotidiana en donde intervienen las diferentes
acciones, condiciones y situaciones del contexto educativo
* Concebir el contexto
educativo como la unidad dialéctica entre sus elementos que son: el
contexto escolar, el contexto comunitario, el contexto familiar y
psiquismo del individuo. El papel del contexto en los aprendizajes
escolares dificulta, entorpece, mediatiza o posibilita mejores aprendizajes
cognoscentes, debido a que el acto educativo siempre se desarrolla en
espacios y situaciones históricas que reflejan las contradicciones y conflictos
de la sociedad, los cuales se encuentran presentes en la pisque del niño en su
microcosmos
* Respetar la heterogeneidad
y los intereses diversos de los sujetos y, por tanto, la necesidad de una
educación heterogénea que satisfaga el conjunto de necesidades propias de cada
sujeto y de los diversos grupos culturales como conglomerado de intereses
comunitarios.
* El dialogo escolar debe
encarnar un dialogo interactivo entre los diversos actores educativos
propiciando procesos educativos para convertir el aula en verdaderos
espacios de confrontación y debate propios del intercambio de visiones
socio-culturales, para ello debe existir un ambiente que permita el
respeto e integración de valores, ideas, tradiciones, desde la
perspectiva de la diversidad y la pluralidad.
* La evaluación debe considerarse como un
proceso de valoración amplio en donde se emite un juicio de valores basados en
criterios cuantitativos y cualitativos así como diversos tipos de evaluación
con la finalidad de retroalimentar la acción docente y discente para corregir
el actuar áulico de ambos actores.
POR
LAURENTINO MARTÍNEZ TORRES
LICENCIADO
EN EDUC. PRIMARIA